Desde el principio de los tiempos, la pintura lleva impresa la mision de retener la experiencia vivida en la humanidad. Gisela Hammer nos invita a ampliar esa mision. En sus cuadros de Africa se plasma la vida y la renovacion, la artista crea una obra única : la plenitud, la inmediatez y la ambivalencia del continente se manifiestan en un estilo que combina la intuición con la metodología sofisticada. El tema del hombre está en su existencia elemental: rostros y cuerpos, puesto en la vida en el paisaje mostrando su violencia fatal, responiendo con la inmutabilidad de la fuerza y la fuerza de voluntad.El proceso de pintura expande el lienzo sin límites a un campo de acción, capa por capa, construido, rechazado y reconstruido. Cada capa sigue siendo parte del cuadro. La dignidad natural, alegría, melancolía, pasión y orgullo – todo lo que puede testificar las caras de África – se abre en una mágica absoluta. Biodiversidad y profundidad – traído en el espacio y en el color. Las Obras de Gisela Hammer desatan una dinámica que está moviendo en todos los sentidos de la palabra.
Dr. Olaf Willett, Kulturhistoriker
