En el perímetro de esta habitación de 15 metros cuadrados, Zenitart ha sobrevivido 730 días metiendo a 22 creativos uno tras otro en sus paredes, escalando sus muros blancos con ganchos e hilos.
Y desde las paredes, los 22 nos han dicho lo que deseaban decirnos, y nosotros, los mirones, exposición tras exposición hemos acudido al show real que es en definitiva el arte, a ver la expresión contada con un pincel o con las manos. Hemos sigo los testigos que con diferentes versiones hemos abierto la boca de sorpresa por un detallito perfilado en un trocito de pared; o la hemos abierto simplemente por un trocito de coca con pimientos de la mesita de la izquierda y que nada más cruzar la puerta hay en el espacio minúsculo, en el pequeño reducto que han llenado de aventuras los apóstoles del arte, llamados ahora artistas, escultores, fotógrafos o pintores, sencillamente caminantes con sandalias que se inspiran en sus propios resplandores.
La maravilla de los 15 metros cuadrados de Zenitart, es que en dos años ha sido la pasarela del talento, ha sido el pequeño espacio donde se han aliado libertad y espontaneidad para alcanzar cada exposición. Zenitart ha generado en 24 meses el número más próspero en arte con pocos metros cuadrados. En su pequeño espacio casi triangular ha eclosionado el 6, el número de la suma del 15, el de la mentalidad abierta, el de la mente inquieta que arranca siempre maximizada.
Zenitart ha multiplicado efectos y ha conseguido que el arte fuera un tema nuevo, que se rescribiera con párrafos de novedades, con otra literatura de pincel. Le ha dado frescura poniéndole otro look mucho más natural.
Y pongo en sus paredes ahora mi granito con tonalidad de letrista, y afirmo que en el mini reducto de las 22 exposiciones los tópicos han caducado, porque aquí una flor si crea el verano. Que en los 15 metros cuadrados incluso la flor ha estado fresca dos años, ha impregnado de aromas de arte dos veces las cuatro estaciones. Y todo gracias a la dedicación exquisita del jardinero de colores que durante 730 días la ha cuidado y la ha regado, y que además ha sabido cómo superar el 15 de la realidad y cambiarlo al 6 imaginario de Zenitart: Carlos Quintana.
Anthel Blau
23 DE Abril de 2014